Más de 2.500 familias porteñas viven con el gas cortado

Más de 2.500 familias porteñas viven desde hace seis meses con el suministro de gas cortado debido a las fallas edilicias en los edificios y a la falta de recursos para reparar los daños estructurales, aseguró la organización Inquilinos Agrupados, y planteó que el gobierno de la Ciudad "no asume un rol activo en la resolución de esta problemática".

La entidad destacó que "son familias que viven en edificios con graves deficiencias en la instalación del servicio", por lo que instó al gobierno porteño a "dejar de hacerse el desentendido y asuma un rol activo en la resolución de esta problemática, generando políticas activas que ayuden a estas familias a reconectar el servicio de gas".

Inquilinos Agrupados aseguró, además, que "las obras para reconectar el servicio cuestan mucho dinero y demandan largos períodos de tiempo. La inversión, dependiendo de la gravedad del problema, puede llegar a los 30.000 o 40.000 pesos por departamento y las obras pueden demorar varios meses".

En este sentido, afirmaron que en el último año "las llamadas que recibieron de los inquilinos que sufren este problema se multiplicaron exponencialmente. Se trata de cientos de familias que alquilan una vivienda sin gas, con la pérdida de calidad de vida que eso acarrea".
 
"Los principales damnificados por esta situación son los dueños y los inquilinos de los edificios sin gas, que tuvieron que adaptar su vida a esta falencia", sostuvo la organización. 

Precisaron que esta situación representa "un problema para el Gobierno de la Ciudad y para la calidad de vida del resto de los porteños, ya que los vecinos de los edificios sin gas empiezan a usar mayor cantidad de equipos eléctricos, como ser: cocinas, calefones y sistemas de calefacción. Artefactos que demandan un gran consumo y que contribuyen en la saturación y posterior colapso del suministro eléctrico".