Los trabajadores de La Litoraleña denuncian vaciamiento y 29 despidos

Los trabajadores de la fábrica de tapas de empanadas y tartas “La Litoraleña” denunciaron ayer el vaciamiento de la empresa y pidieron la reincorporación de los 29 compañeros que fueron despedidos el viernes pasado, después de tomar una medida de fuerza tras cuatro meses sin cobrar sus salarios, en una conferencia de prensa que se realizó en la puerta de la fábrica, en Girardot 345, en el barrio de Chacarita.
 
El dueño de la empresa, Rodolfo Conti, adeuda cuatro meses de sueldo al personal. En agosto pidió la apertura del concurso de acreedores y denunció un pasivo de 84 millones de pesos, un monto que incluye una deuda de 17 millones con la AFIP. El viernes pasado, tres días después de que los trabajadores dejaran de producir y armaran guardias para quedarse en la fábrica en resguardo de su lugar de trabajo, el empresario despidió a 29 trabajadores, la mayoría de ellos con más de 30 años de antigüedad.
 
Los legisladores porteños José Cruz Campagnoli (Nuevo Encuentro-FpV) y Fernando Muñoz (Liberación- FpV), los comuneros kirchneristas Carlos “Lito” Grisafi y Camila Rodríguez, entre otras organizaciones sociales y sindicales participaron del acto y manifestaron su preocupación. “Vamos a acompañar a los 115 trabajadores de La Litoraleña en esta digna y justa pelea por sus fuentes de trabajo”, expresó Campagnoli. Y agregó: “La estrategia de la patronal es vaciar la empresa o generar conflicto para echar a trabajadores y así recomponer su tasa de ganancia. Con todo esto, está violentando el derecho laboral que la constitución garantiza. Lo importante en Argentina es defender la fuente de trabajo, así que acompañaremos a los trabajadores hasta que el dueño dé una respuesta”.
 
Además de no pagar los sueldos, el empresario dejó de realizar los aportes a la seguridad social y de hacerse cargo de cumplir con los convenios firmados con una mutual de consumo y crédito, que les reclamó a los propios trabajadores el dinero que la empresa debía pagar.
 
En tanto los 80 trabajadores anunciaron que crearán una cooperativa de trabajo para retomar autogestivamente esta misma semana la producción, paralizada desde hace siete días por la falta de insumos y el atraso salarial.
 
Los trabajadores estuvieron acompañados por referentes de ATE, de la Federación Argentina de Cooperativas de Trabajadores Autogestionados (Facta), de la Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo (CNCT), de distintas organizaciones políticas y de otras empresas recuperadas como la parrilla Los Chanchitos.
 
El delegado de los trabajadores, Luis Baini, aseguró que el objetivo ahora es conseguir "respaldo político y de la comunidad para defender la fuente de trabajo retomando la producción autogestionadamante como cooperativa de trabajo esta misma semana, porque nuestras familias ya no aguantan más y ellos no tienen ninguna respuesta".
 
Fundada en 1971, la empresa Deconti fabrica pastas frescas, piononos, tapas de empanadas y de pascualinas con dos marcas: "La Litoraleña" y "Doñamasa".
 
José Cruz Campagnoli aseguró que se trata de "un caso claro de vaciamiento por parte del dueño de esta empresa, Rodolfo Conti. Esta empresa es una empresa rentable, que tiene mercados abiertos, ningún problema de producción ni de colocación de sus productos, por lo tanto lo que hay es un intento de vaciamiento o reducción del plantel para achicar 'costos laborales' que mejoren la ganancia del dueño sometiendo a situación lamentable a 115 trabajadores con sus familias", dijo.
 
Por su parte, Fernando Muñoz expresó su "solidaridad y apoyo absoluto a los trabajadores en esta situación. Los camiones, las máquinas y las plantas son para trabajar y si el patrón se borra, si las quiere utilizar a espaldas del derecho de más de un centenar de trabajadores, se tiene que hacer de manera autogestionada, con respaldo de las organizaciones que históricamente han estado apoyando a estos movimientos", consideró.
 
A su turno, el abogado de los trabajadores, Afaliva Dinani explicó que los 29 trabajadores recibieron sus telegramas de despido el pasado viernes como toda respuesta a la reunión mantenida con el empleador, donde se le planteó "el pago inmediato de uno de los salarios y el establecimiento de un cronograma de pago para completar los otros dos adeudados", manifestando así su "vocación de diálogo".