Licitan la construcción de viviendas en el barrio Papa Francisco

Dos años después del plazo que había estipulado la Justicia porteña tras el desalojo, el Gobierno de la Ciudad dio el primer paso para la urbanización total del predio conocido como Papa Francisco, en Villa Lugano, lindero a la Villa 20. Había sido tomado por 700 familias en febrero de 2014 y durante la ocupación, que se prolongó por seis meses, hubo dos muertes.
 
La etapa inicial del proyecto, que demandará una inversión de $ 730 millones, abarca la construcción de 552 viviendas, 24 locales comerciales y otras obras, según fue publicado ayer en el Boletín Oficial por el Instituto de la Vivienda de la Ciudad (IVC) y el Ministerio de Desarrollo Urbano, según informa La Nación.
 
El desarrollo ocupará las tres manzanas situadas sobre la Av. Fernández de la Cruz, entre las calles Pola y Araujo; las restantes serán intervenidas en una segunda etapa. Cada manzana tendrá tres módulos dobles y las unidades funcionales estarán agrupadas en torno a un núcleo vertical circulatorio que unirá 16 viviendas. Hasta allí se podrá acceder desde la vía pública o por los senderos peatonales. Los módulos estarán compuestos por una planta baja y tres pisos.
 
Una segunda etapa contemplará otras 782 viviendas, para sumar un total de 1334 para toda la urbanización del predio Papa Francisco. Además, según anunció el Gobierno porteño, se abrirán calles, se crearán nuevos espacios verdes y se construirá infraestructura pública para educación y salud.
 
Las viviendas proyectadas tendrán de uno a tres dormitorios, cocina completa y baños totalmente equipados. Además, los departamentos de planta baja contarán con patios y la mitad de ellos serán dotados con sanitarios para adultos mayores o personas con movilidad reducida.
 
La apertura de sobres se realizará el 6 de septiembre y cada empresa adjudicataria podrá ganar sólo una manzana para construir viviendas. El proyecto final prevé la integración de Papa Francisco con la Villa 20; una mesa de debate con los vecinos del barrio se reúne periódicamente.
 
Los vecinos habían frenado una propuesta anterior de urbanización por considerarla inadecuada para el barrio. Objetaron el diseño presentado y el tipo de materiales previstos, y además reclamaron por no haber sido invitados a participar de la discusión.
 
La historia trágica del predio culminó en agosto de 2014 con el desalojo realizado por el Gobierno de la Ciudad. Días después, la jueza Elena Liberatori ordenó comenzar la urbanización (incluida la construcción de viviendas) antes de que finalizara ese año. Hasta hoy, sólo se descontaminó el terreno y se concretaron trabajos menores.