Los vecinos podrán denunciar focos de riesgo del mosquito del dengue

El Gobierno de la Ciudad presentó medidas para evitar que el dengue vuelva a instalarse en la comunidad este verano. El plan oficial, que instrumentarán áreas de todos los ministerios, apunta a eliminar los reservorios de huevos del mosquito transmisor, informar a la comunidad casa por casa e instar a los vecinos a que participen más activamente que el verano pasado en la prevención de focos de riesgo. Para eso podrán llamar a la línea 147 y así alertar sobre la existencia "real o potencial" de criaderos de mosquitos, como autos y obras abandonadas, baldíos o basura acumulada.
 
En las escuelas, los chicos aprenderán jugando y con material didáctico qué virus transmite el mosquito Aedes aegypti y cómo reconocer sus criaderos. Y, desde esta semana, promotores tocarán timbre en los hogares para brindar información sobre cómo descacharrizar las viviendas para eliminar los lugares donde hayan quedado huevos. Con el calor aparecerán las larvas.
 
Los recorridos empezarán por las Comunas 4 y 7, que incluyen los barrios de La Boca, Barracas, Parque Patricios, Nueva Pompeya, Flores y Parque Chacabuco. La Comuna 4 fue una de las más afectadas el verano pasado.
 
"Éste es el gran momento que tenemos para bajar la prevalencia del dengue, la chikungunya y el zika en el verano", dijo a La Nación la ministra de Salud, Ana María Bou Pérez. El Aedes aegypti transmite los virus que causan las tres enfermedades.
 
La funcionaria comentó que hay 430 promotores que ya recibieron entrenamiento y están controlando las instituciones de salud de la Ciudad, incluido el edificio del Ministerio de Salud porteño, para certificar que las instalaciones están libres de Aedes aegypti. La semana que viene, los recorridos preventivos se extenderán a las calles.
 
"Nuestra expectativa es que los vecinos aprendan cuáles son las medidas de prevención, las pongan en práctica y, a la vez, sean transmisores de cómo descacharrizar. Hay lugares en las casas donde se puede criar el mosquito y que no son tan obvios todavía para la comunidad, como las canaletas, las rejillas, los escombros o los adornos en el jardín que juntan agua cuando llueve", agregó Bou Pérez.
 
Por su forma de transmisión, este tipo de enfermedades vectoriales demanda la participación activa de la población. Esto, a la vez, exige a las autoridades que trabajen y respondan de manera inmediata con las acciones más efectivas para cada momento, según el monitoreo de la población de mosquitos y la vigilancia epidemiológica, entre otras medidas.
 
En la vía pública, los vecinos deberían empezar a notar cambios en las próximas semanas. El Ministerio de Ambiente y Espacio Público estará a cargo del saneamiento y el ordenamiento ambiental en los barrios. "Hay mucho trabajo por hacer en la vía pública", admitió Bou Pérez. En los hospitales y los centros de atención comunitaria, según el plan, los profesionales recibirán los insumos necesarios para atender a los pacientes que lleguen con síntomas sospechosos.
 
En el país, la circulación viral cesó en la primera semana de julio pasado. Desde entonces, en la Ciudad se confirmó un nuevo caso de zika y todavía hay en estudio tres de la misma enfermedad, 14 de dengue y cuatro de chikungunya.