No hubo diálogo para la escuela Lorca de La Paternal

La semana pasada comenzaron las obras para la construcción de un jardín maternal en la escuela secundaria García Lorca, ubicada en el barrio de La Paternal. La comunidad educativa logró que las obras se detengan hasta ayer cuando el Gobierno de la Ciudad se comprometió a abrir una mesa de diálogo, pero no las autoridades del Ministerio de Educación se negaron a discutir con los tres representantes a los que autorizaron a asistir a la reunión.
 
Sin cartel de obra y pese a existir un recurso de amparo presentado a la Justicia, el Gobierno de la Ciudad comenzó  la obra de un jardín maternal dentro de la escuela de enseñanza media Federico García Lorca, ubicada en Chorroarín 305.
 
En la reunión que se celebró ayer por la mañana, las autoridades del Ministerio de Educación, conducido por Soledad Acuña, se negaron a armar la mesa de diálogo acordada el viernes pasado con la comunidad educativa conformada por estudiantes, padres, docentes, gremios y vecinos. 
 
“Nos avisaron que la obra inconsulta se reinicia hoy miércoles, por eso a las 8 horas nos volvemos a concentrar en la puerta de la escuela para intentar frenar el reinicio de obra y realizar una asamblea. La comunidad del Lorca convoca a los vecinos, gremios, legisladores, colectivos barriales y organizaciones a acompañar la asamblea y las medidas que allí se establezcan”, expone la comunidad educativa en un comunicado enviado a Nueva Ciudad.
 
“Las autoridades del Ministerio se negaron a todo, les pedimos los planos de la obra y no lo mostraron, les  pedimos un acta sobre esta reunión y escribieron cosas que no se habían dicho, les pedimos que la modifiquen y se negaron, nos fuimos sin firmarla”, cuenta a Nueva Ciudad una docente que pudo subir a la reunión, porque sólo lo pudieron hacer tres representantes por la comunidad educativa.
 
La empresa Ingenor es la encargada de construir el jardín maternal dentro de la escuela Lorca. La obra ya cuenta con un obrador y con un cerco que delimita el terreno. La obra que pretende hacer el Gobierno porteño tendría una duración de un año, de esta manera los chicos se  quedarían sin patio para los recreos.
 
El Ministerio de Educación porteño decidió tomar, de manera inconsulta, el patio arbolado -al que dan las aulas- y un playón de la escuela que se usan para actividades pedagógicas, recreativas y del centro de estudiantes para mudar el jardín maternal que funciona en el hospital Tornú, en el barrio de Villa Ortúzar.
 
La EEM N° 1 está ubicada frente a la Facultad de Veterinaria, rodeada de inmensos terrenos verdes lindantes. A diferencia de lo que sucede en otros barrios, hay lugar para construir un jardín maternal junto a la escuela secundaria y no dentro de ella.
 
Desde la fundación de la escuela Lorca se adeuda la construcción de un gimnasio en un sector del predio, que figura en los planos pero nunca se efectivizó. Los chicos del Lorca deben concurrir a las clases de educación física al club Argentinos Juniors.