La casona de Lucio Mansilla en Belgrano será para el Museo de Arte Oriental

Por segunda vez en medio siglo, el Museo Nacional de Arte Oriental (MNAO) atraviesa la misma circunstancia: el acondicionamiento de una sede para exponer y conservar las 3100 piezas que integran su colección, informa La Nación.
 
El Ministerio de Cultura de la Nación planea rediseñar la mansión que perteneció a Lucio Mansilla, en el barrio de Belgrano, expropiada por el Estado en 2013, para instalar allí el Museo de Arte Oriental.
 
Para elaborar un plan de reformas de esa casona, ubicada en Tres de Febrero, entre Olazábal y Blanco Encalada, se contrató a un diseñador inglés, Stephen Greenberg, del estudio Metaphor, que vendrá a Buenos Aires entre el 22 y el 28 del próximo mes. Así lo confirmaron a La Nación el secretario de Patrimonio, Marcelo Panozzo y Américo Castilla, asesor del ministro Pablo Avelluto.
 
El Museo de Arte Oriental fue creado en 1965, funcionó de forma transitoria hasta 2001 dentro del Museo de Arte Decorativo, en el Palacio Errázuriz. Un robo provocó su cierre y sus obras terminaron embaladas y depositadas en dos habitaciones cerradas al público, donde permanecen hasta ahora.
 
En 1996, un decreto del entonces presidente Carlos Menem designó al Oriental "en forma definitiva" el edificio de Riobamba 985. Pero durante la gestión de Fernando de la Rúa, el arquitecto Luis Caffarini diseñó una remodelación, que comenzó a ejecutarse, hasta que sucedió aquel robo y las obras se frenaron. Luego, el gobierno de Néstor Kirchner instaló allí la Casa Nacional del Bicentenario.
 
El MNAO estuvo intervenido por años y luego careció de director, la autoridad administrativa había sido delegada al director del Museo de Arte Decorativo, hasta que, en 2016, Avelluto designó a Rocío Boffo.
 
Como en el caso del Museo de Grabado, que tiene colección, pero sin casa propia, Panozzo confirmó que recién realizará un tercer llamado a concurso por estos casos, cuando tengan sede, en 2018.