Entregarán un petitorio en el ministerio de Educación contra la quita del pan de los menús escolares

Apenas se implementó, el programa “Chau paneras” desató una fuerte polémica. La quita del pan de los menús de las escuelas públicas porteñas fue anunciada por el Ejecutivo como una medida saludable, pero de inmediato comenzaron las críticas de padres, madres y docentes por el achique de las raciones. Un mes después, las quejas siguen en pie. El lunes próximo se entregará en el Ministerio de Educación un petitorio con cientos de firmas “solicitando acceso a la información sobre las concesionarias, las porciones y la información nutricional integral”.

La medida fue impulsada desde el colectivo Vacantes para tod@s en las Escuelas Públicas y nuclea el reclamo de “familias y docentes alarmados/as por los cambios implementados recientemente en la alimentación de niños, niñas y jóvenes en las Escuelas Públicas del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires”. La recolección de firmas pasó por “decenas de escuelas”, según informaron desde ese espacio, y el lunes se entregará el petitorio a las 13, en la sede de Paseo Colón 255.

“El Ministerio de Educación e Innovación de la Ciudad de Buenos Aires a cargo de Soledad Acuña como ya es costumbre aplica todo tipo de cambios inconsultos y arbitrarios, sin dialogar con la comunidad educativa, sin dar lugar a que podamos asesorarnos para contar con el aval de profesionales en la materia”, cuestionaron desde Vacantes para tod@s. “Durante las últimas semanas hubo numerosas denuncias por el mal estado de la comida, de las frutas, por la reducción de las porciones, por el título engañoso de la comida en los menús que no se condicen con lo que fehacientemente se les brinda a los niños y niñas en los comedores”, advirtieron. Y remarcaron: “La quita de algunos alimentos como las rodajas de pan en las escuelas jornada completa, a la vez que sí lo comenzaron a enviar como desayuno y merienda a escuelas media jornada, contradiciéndose con los dichos de funcionarios/as que justificaron el recorte con el ridículo  argumento de que era con la intención de impedir la obesidad infantil, cuando no eran más que dos pequeñas rodajas de pan por niño que ayudaba a empujar la comida muchas veces aguada que le presentan en los platos”.

En tanto, en las últimas semanas ya había sido presentado un pedido de informes en la Legislatura -por parte de Andrea Conde, de Unidad Ciudadana- para que el Ejecutivo porteño dé explicaciones sobre el nuevo contenido de los menús.