EDUCACIÓN

Olla popular frente al Ministerio de Educación porteño: “Con hambre no se puede estudiar”

La protesta fue organizada por centros de estudiantes del sur de la Ciudad. Reclaman mayores y mejores viandas, más plazas en los comedores escolares y ser recibidos por la ministra Acuña. En tanto, se aprobó en la Legislatura un pedido de informes sobre el polémico programa “Chau Paneras”.



Alumnos y alumnas nucleados en la Unión de Centro Estudiantes del Sur (UnCES) realizaron una olla popular en la puerta del Ministerio de Educación de la Ciudad, bajo la consigna “con hambre no se puede estudiar”. 

La UnCES agrupa a distintos centros de estudiantes de las escuelas del Sur de la Ciudad y lleva adelante un reclamo por mayores y mejores viandas, así como por la apertura de comedores escolares. Por ese motivo marcharon hace dos meses y “ante la nula respuesta de Soledad Acuña, titular de la cartera de Educación” optaron por instalar la olla popular este miércoles a modo de protesta y para exigir una reunión con la Ministra.

Jennifer, estudiante de la EEM 6 DE 5 (de Barracas), explicó en diálogo con Radio Gráfica los motivos de la medida: “Hay chicos que tienen familias que no les está alcanzando la plata, no llegan a fin de mes, pasan hambre. La Ministra dijo que hay un protocolo para estos casos, pero somos muchos colegios con esta problemática por las viandas. Hay pibes pasando hambre en las escuelas y la Ministra no se hace cargo, lo consideramos una falta de respeto”.

Sobre las viandas, agregó que “llegan a varios colegios en mal estado, verdes o con manzanas podridas. Se otorga una fruta por día por esto de la vianda saludable, pero están pasando hambre en las escuelas”. Días atrás, docentes y vecinos realizaron una olla popular en el Bajo Flores para visibilizar y alertar sobre la falta de comida y abrigo entre los alumnos y alumnas de la zona. 

La polémica por el tamaño de las viandas se instaló cuando el Gobierno de la Ciudad lanzó el programa “Chau Paneras”, argumentando que las modificaciones apuntaban a una alimentación más saludable. Pero, de inmediato, padres y docentes alertaron que en los hechos implicaba un achique de raciones.

En la sesión de este jueves en la Legislatura porteña, de hecho, se aprobó un pedido para que Ejecutivo porteño brinde precisiones sobre el nuevo plan alimenticio escolar. El pedido de informes sobre el programa “Chau Paneras” apunta a que el Gobierno indique “en base a qué estudios científicos se tomaron las medidas de modificación del menú escolar”, que “informe si los alimentos retirados del menú escolar fueron reemplazados por otros que cubran la cantidad de calorías requerida por los niños de acuerdo a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud”, que detalle “qué medidas se tomaron para garantizar la educación en materia de alimentación en las escuelas y qué acciones se desarrollaron para coordinar políticas multisectoriales para promover la actividad física”, entre otras cuestiones.

La Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) acompañó a la Coordinadora de Estudiantes de Base en la olla popular, donde además de denunciar el hambre en las escuelas estuvo presente el "reclamo por problemas de infraestructura de los establecimientos educativos,  la falta de espacios para la cursada por la aplicación de la reforma de la 'secundaria del futuro' y la falta de escuelas en la zona sur de la Ciudad". Durante la actividad se manifestó el rechazo  a la aplicación del protocolo contra las tomas de colegios que criminaliza a lxs estudiantes y se exigió que la gestión porteña se abra al dialogo y escuche los reclamos.


 

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