Juicio por Pérez Volpin: para Lousteau "la verdad la dijo la justicia, a Débora la mataron en el quirófano"

El Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional 8 condenó al endoscopista Diego Bialolenkier a tres años de prisión condicional por el homicidio culposo de Débora Pérez Volpin pero su pena no será de cumplimiento efectiva. En tanto, la anestesista Nélida Puente fue absuelta.

Tras salir de la audiencia el viernes por la noche, el abogado de la querella, Diego Pirotta, aseguró a los medios que hasta el momento no conocían los argumentos de parte de los magistrados sobre la absolución de Puente. "(Los peritos) refirieron la responsabilidad penal por la muerte de Débora exclusivanente por las maniobras del endoscopista", dijo, y aseguró que apelarán. Sobre la condena Bialolenkier, aseguró: "La familia va a respetar eso y no se va a apelar la cantidad de pena que se le dio al endoscopista". 

Otro de los que también se refirió al fallo fue el precandidato a senador nacional de Juntos por el Cambio, Martín Lousteau. "A Débora la mataron. Es un día raro", expresó en diálogo con América Tv, y recalcó: "La verdad la dijo la justicia: a Débora la mataron en el quirófano".

"He visto el dolor de una familia, no solo por lo inesperado y lo injusto, sino por todo lo que han tenido que atravesar; la entereza de Quique, de Agustín, de Luna, de Marcelo, de los hermanos, es admirable. Es una muestra de lo que era Débora, ella formó esa familia", afirmó el líder de Evolución.

Este viernes fue la última jornada del juicio oral que se entabló contra los dos profesionales. Poco antes del final, Pirotta había responsabilizado a los médicos que participaron de la endoscopía durante la cual se produjo el desenlace fatal. "Nunca nadie entendió cómo sucedió esto de esta manera. Cómo es que esta barbarie pasó y en cuánto pasó.No se logra explicar cómo ocurrieron en cada instante tantas cosas mal hechas. Y ante la emergencia, no supieron cómo proceder; no sabían resolver una crisis", aseguró.

Y agregó: "Hoy estamos juzgando a dos médicos que consideramos responsables por la muerte. No todos los endoscopistas perforan a un paciente, ni todos los anestesistas no pueden no reanimar a un paciente". El abogado hizo referencia, además, a cómo fue la mecánica que derivó en la muerte de la periodista: "La perforación se produjo en el minuto uno y se desparramó por todo el cuerpo; Débora dejó de respirar y el corazón dejó de funcionar y los médicos no se dieron cuenta. Siguieron con el procedimiento y nunca se dieron cuenta".