Subió el desempleo en la Ciudad: 10,5 por ciento en el tercer trimestre de 2019

La tasa de desocupación llegó al 10,5% de la población económicamente activa de la ciudad de Buenos Aires en el tercer trimestre de 2019. Esto implica que 181.000 personas buscaron trabajo y no lo encontraron, según datos de la Dirección General de Estadísticas y Censos porteña (DGEyC).

El aumento representa una variación interanual de más de un punto porcentual, de 9,4% a 10,5%, producto de una mayor tasa de actividad -personas que buscan empleo-, que pasó de 63,7% en el tercer trimestre de 2018 a 65% en el mismo período de 2019, mientras que la tasa de empleo pasó de 57,7% a 58,2% en ese lapso, según consignó el portal Minuto Uno.

En tanto, la contracción del mercado de trabajo también se vio reflejada en la insuficiencia del volumen de empleo para personas ocupadas. Así se desprende del informe "Caracterización de la PEA. Ciudad de Buenos Aires. 3er. trimestre de 2019", difundido este miércoles.

Para este segmento, la tasa de subocupación demandante -que incluye a quienes trabajan menos de 35 horas a la semana, pero desearían y podrían trabajar más- alcanzó a 5,3%, que equivale a 92.000 personas que declararon estar buscando otra ocupación.

En cuanto al tipo de ocupación, el 51,9% de la población ocupada de la Ciudad se desempeña en puestos de baja calificación, operativa y no calificada, aunque con una reducción de esta porción en la comparación interanual en favor de los de alta calificación.

El 83,1% de los asalariados son aportantes, con un 74.3% de ocupados cuyos aportes jubilatorios los hace su empleador y otro 8,8% que se hace cargo personalmente de efectuarlos al sistema. Así, el 17% de los asalariados no tiene cobertura de la seguridad social.

La desigualdad sigue reflejándose en relación al servicio doméstico en hogares particulares: lo ejercen en un 99% mujeres y emplea a casi el 6% de la población asalariada, porcentaje que se mantuvo estable a lo largo de los últimos años.

Al mismo tiempo, las mujeres presentan tasas de desocupación de 11,6%; de subocupación, de 12,1%; y de precarización superiores a las los varones, así como tasas menores de participación, de 59,8% frente al 71% de los hombres, y de empleo, de 52,9% contra 64,4%.