Podría cerrar el bar Homero Manzi de Boedo

El legislador porteño del Frente de Todos Matías Barroetaveña presentó un proyecto de declaración para manifestar su preocupación frente al inminente cierre del bar Esquina Homero Manzi, del barrio de Boedo. Peligra la continuidad laboral de 160 trabajadores, quienes han sido incluidos en el programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP) por el Gobierno nacional.
 
El bar Esquina Homero Manzi está registrado entre los bares notables de la Ciudad. Para Barroetaveña "es necesario un aporte complementario de la Ciudad, como lo ha hecho el Gobierno de la provincia de Buenos Aires". "El gobierno de Rodríguez Larreta debe impulsar de manera urgente políticas de protección del trabajo que complementen las medidas asumidas a nivel nacional, de lo contrario, se destruirán miles de comercios y puestos de trabajo en la Ciudad de Buenos Aires", señaló Barroetaveña.
 
Cabe recordar que Barroetaveña ha presentado una serie de proyectos en la Legislatura tendientes a la protección del empleo, sostenibilidad de MiPymes y asistencia a centro culturales independientes que apuntan a eximir de impuestos, garantizar acceso a crédito y realizar aportes salariales a empresas no exceptuadas del Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio.

El Homero Manzi es un bar y restaurante inaugurado en 1927, símbolo de la cultura urbana de la década del cuarenta, ubicado en la tradicional esquina de San Juan y Boedo. Fue declarado Café notable en 2004​ por la Comisión de Protección y Promoción de Cafés, Bares, Billares y Confiterías Notables de la Ciudad de Buenos Aires. La esquina fue declarada Área de Protección Histórica (APH) con nivel de protección cautelar. El bar toma su nombre del letrista, político y director de cine Homero Manzi, quien escribió el tango “Sur” en este establecimiento en 1948.
 
El local fue abierto con el nombre “El Aeroplano”. En 1937 el café fue comprado por dos socios japoneses que lo rebautizaron “Nippon”. En 1948 los nuevos dueños decidieron llamarlo “Canadian” y en 1981 el café adquirió su denominación actual. ​ El 6 de marzo de 1999 el café cerró sus puertas. Fue renovado y vuelto a abrir en 2001. ​Fue lugar de encuentro de la famosa corriente literaria de Boedo, que, por sus pensamientos anarquistas o socialista, debido a que sus componentes eran hijos operarios inmigrantes europeos que habían llegado a comienzos de 1900 al país. Se contraponen a la corriente de Florida.