CORONAVIRUS

Crisis sanitaria: falleció un hombre que tuvo que esperar tres días para una cama de terapia intensiva

Jorge Agüero tenía 60 años y su caso se hizo conocido gracias a la denuncia de su esposa, quien reclamó por la demora en el ingreso a la terapia. La mujer calificó la espera como “una agonía”.

Hoy, Jorge Agüero, un hombre de 60 años que había contraído coronavirus la semana pasada, falleció este jueves tras un empeoramiento de su cuadro derivado de problemas respiratorios. Su caso se conoció gracias a las denuncias que realizó su esposa, Claudia Lima, quien relató que uvieron que esperar tres días para acceder a una cama de terapia intensiva en el Hospital porteño Dr. Cosme Argerich.

Lima, en diálogo con Télam, había calificado como "una agonía" los tres días que su esposo debió esperar para ser atendido con la tecnología y el servicio médicos que la complejidad de su cuadro de coronavirus requería. El caso de Jorge se inscribe en el estado de tensión que exhibe en las últimas semanas el sistema sanitario de la Ciudad.

Según los datos del Gobierno porteño y de la Sociedad Argentina de Terapia Intensiva, la ocupación de camas de terapia intensiva (TI) creció en el distrito a partir de abril ante la segunda ola de coronavirus y registra en la actualidad un nivel del 84 por ciento en el sistema sanitario público y por encima del 96 por ciento del sector privado.

Entrevistada por Télam el sábado pasado, Claudia había contado que Jorge contrajo coronavirus porque no le quedó otra opción que salir a trabajar, vendiendo churros, para dar sustento a su familia. "Toda esta pandemia nos llevó a que la situación fuera muy difícil. Yo estoy sin trabajo y mi marido es churrero de profesión y se contagió saliendo a vender. No queda otra, hay que pagar el alquiler, darle de comer a los nenes y pagar los servicios, lo esencial", relató la mujer antes del fallecimiento de su marido.

"Uno no salió a buscar ese virus, no hay que salir, pero cuando no tenés para darle de comer a tus hijos tenés que salir, y a veces el barbijo y el alcohol no alcanza", se lamentó.

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