Juntos y una interna que no se puede disimular

La carrera hacia el 2023 comenzó en Juntos mucho antes de lo esperado. La campaña del Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, a lo largo y ancho del país, puso en evidencia las intenciones del líder político, pero al mismo tiempo dejó entre ver que no será el único con aspiraciones de llegar a la Casa Rosada.

En medio de los festejos medidos por el triunfo en los comicios legislativos del domingo, un grupo de militantes de Juntos cortó la intervención de Larreta para vitorear “el que no salta es radical”, como manifestación contra la Unión Cívica Radical, partido centenario y bastión en la composición de la coalición.

La expresión del público dejó incomodidad en algunos referentes de la UCR, como el senador y economista Martín Lousteau,
quien fue uno de los más participativos en los actos de campaña, tanto en el terreno porteño como en la Provincia, acompañando a Facundo Manes y Diego Santilli, aunque, por el contrario, no cayó del todo mal en el ala dura del PRO, como es la Presidenta de dicho espacio, Patricia Bullrich que esbozó una sonrisa en el escenario.

Más allá de las metas personales de cara a las elecciones presidenciales, los cánticos de la gente tienen un episodio previo y un contexto paralelo, es que la postura sobre el coqueteo con la fuerza que encabeza Javier Milei (Avanza Libertad) fue otro de los motivos que generó distanciamientos en Juntos por el Cambio.

“Con Milei no se habla” fue el mensaje de los militantes de la UCR en el cierre de campaña cuando Bullrich tomó el micrófono, por lo que la manifestación de los simpatizantes del sector más tradicional del PRO en los festejos de este domingo, también son una respuesta en defensa de una de sus principales representantes políticas.