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- 15.04.2022
SEGURIDAD
Siguen las críticas contra el Gobierno porteño por el uso de datos biométricos: “El espionaje no para”
La conducción de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos señaló que el trabajo que lleva adelante el organismo de seguridad de la Ciudad es “ilegal”, en tanto agregaron: “El espionaje y la represión no paran. La transformación no es para el pueblo de la CABA”.
El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires está en el centro de la escena a raíz de la utilización de datos biométricos que desencadenaron una serie de denuncias por posible espionaje sobre personalidades de la política e incluso vecinos y vecinas porteños.
En esta oportunidad se pronunciaron con un fuerte mensaje desde la Asamblea Permanente de Derechos Humanos (APDH) para repudiar el accionar del gobierno que encabeza Horacio Rodríguez Larreta.
“Una vez más la ilegalidad es la regla en un gobierno de Juntos por el Cambio, en este caso en el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta en la CABA", apuntaron desde la conducción de la APDH en un documento difundido este jueves bajo el título: "El espionaje y la represión no paran. La transformación no es para el pueblo de la CABA”.
Luego de que la justicia suspendiera el sistema de reconocimiento facial de prófugos del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires tras detectar un uso ilegal, desde la conducción de la APDH apuntaron a “tres gravísimos hechos presentado en esta semana en distintos ámbitos" porteños.
“El primero de ellos, el tatuado de niñxs con logos y propaganda del Gobierno de la Ciudad en una escuela. En segundo lugar, otro ministro de Larreta, el de Seguridad, Marcelo D´Alesandro accedió de manera ilegal a datos que comprometen la seguridad y la intimidad de distintos opositores al signo del PRO, incluyendo funcionarios públicos, entre ellos el señor Presidente (Alberto Fernández) y la señora vicepresidenta de la Nación” Cristina Fernández de Kirchner, dice el documento.
Y concluyeron: “El tercer hecho a mencionarse -agregaron- es la represión ejercida días pasados por la policía de la CABA a los manifestantes en el Incaa, que culminara con la detención indebida y arbitraria de un estudiante de cine”.
Por ello, las titulares de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos opinaron que cada una de las acciones mencionadas “atenta contra los principios de la democracia y la plena vigencia de los Derechos Humanos”.
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