En la Legislatura se realizó una reunión sobre los discursos de odio en los medios de comunicación

La diputada de la Ciudad Victoria Montenegro llevó adelante la II Mesa de Trabajo contra los Discursos de Odio. En esta oportunidad se abordó la problemática de esta clase de mensajes en los medios de comunicación. Fue así que además de la legisladora estuvieron como expositores Bernarda Llorente, presidenta de la Agencia Télam y el subdirector de Asuntos Jurídicos de la Defensoría del Público Horacio Lutzky. También participó del panel, el legislador del Frente de Todos Claudio Morresi.
 
El evento se realizó en el Salón Montevideo de la Legislatura porteña bajo el título de “Desafíos Comunicacionales frente a los Discursos de Odio”. Luego de las palabras de los expositores el micrófono se abrió a una nutrida presencia de periodistas, representantes de medios de comunicación y escuelas de formación de periodismo.
 
En su exposición Bernarda Llorente destacó “el rol social de los medios de comunicación y como tales nos corresponde a todos dar ese debate en todos los ámbitos. El discurso de odio tiene la perspectiva de condicionarnos. Si somos agredidos por discursos de odio es porque buscan inmovilizarnos. El problema es cuando esas ideas pasan del campo de la palabra a la acción”.
 
Por su parte, Lutzky señaló que “los discursos de odio no son nuevos. Así podemos encontrar ejemplos conocidos ya en 1906 cuando en Estados Unidos varios medios reprodujeron discursos de odio contra los afrodescendientes acusándolos de violar a mujeres. Se trataba de inventos absolutos pero que terminaron incitando a que durante la noche se reúnan diversas personas que terminaron asesinando a decenas de afrodescendientes. Y ni hablar si mencionamos el tema de los discursos de odio contra los judíos en los momentos previos al ascenso del nazismo. Lo que sí se da ahora es una gran potenciación a través de redes sociales”.
 
Al finalizar, la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos, agradeció a las decenas de participantes y recalcó la necesidad de seguir propiciando ámbitos de encuentro donde discutir y trabajar contra los discursos de odio.