Valdés propuso suspender el servicio de acarreo en la Ciudad hasta "regularizar concesiones vencidas"

El legislador porteño del Frente de Todos (FdT), Juan Manuel Valdés, presentó hoy un proyecto de ley para "suspender la concesión del servicio de acarreo de vehículos" en la Ciudad hasta que el Gobierno de Horacio Rodríguez Larreta "efectivice la licitación correspondiente".
 
Valdés declaró: “Frenemos el negociado de las grúas. Presenté un proyecto para suspender el acarreo hasta que Larreta regularice a las 2 empresas a cargo con concesiones vencidas hace 20 años”.
 
“Juntan millones, molestan a los vecinos y sus papeles no están en regla”, indicó en relación a que las empresas que manejan el servicio están operando hace 21 años con el contrato vencido. Su compañero de bloque, Javier Andrade, había denunciado con anterioridad que “el gobierno porteño sigue retrasando la licitación del acarreo”.
 
Andrade recordó que estas empresas encargadas del servicio de grúas pagan de canon sólo el 2 % de la facturación, y “recibieron de la Ciudad, entre 2014 y 2016, 335 millones de pesos”.
 
La concesión del acarreo en la Ciudad está en manos de Dakota SRL y BRD Sociedad Anónima, Industrial, Comercial, Financiera e Inmobiliaria (SAICFI), dos empresas que operan el negocio con el contrato vencido desde hace 21 años. A cargo de los acarreos desde 1990, estas empresas le pagan al gobierno porteño un canon mensual de sólo $55.000 cada una para operar el servicio, según le confirmaron a Infobae fuentes oficiales.
 
El monto está congelado desde 2014 y, hasta hace apenas dos semanas, esa cifra también incluía la concesión de los viejos parquímetros y máquinas tickeadoras para el cobro del estacionamiento medido.
 
Toda la recaudación por levantar autos en infracción son ingresos para BRD y Dakota, empresa que no presentó balances ante la Inspección General de Justicia (IGJ) en los últimos 4 años, según corroboró Infobae. En 2021, fueron 125.000 los acarreos realizados por estas dos concesionarias, lo que elevó su facturación a $547 millones, según el cálculo en base a datos oficiales y el costo del acarreo el año pasado. Sin embargo, el gobierno porteño apenas recibió $1,3 millones de esos fondos, el 0,2%.