Inés Fornassero: “Quiero impulsar propuestas para mejorar la calidad de vida en nuestros barrios”

Inés Fornassero forma parte de la flamante Junta Comunal 3 desde el pasado 10 de diciembre junto a sus compañeros de bancada por Unión por la Patria Carolina Finardi y Eduardo Carnevale. Nos contó su trayectoria, cómo ve a la comuna y sus proyectos para la misma.
 
¿Cuál es tu trayectoria política y social? ¿Cómo llegaste a la política?
 
Milito en el partido Nuevo Encuentro desde el 2014, cuando me acerqué por primera vez a una unidad básica, en el barrio del Abasto, sin conocer a nadie. Seguía la trayectoria de Martín Sabbatella, y algunos proyectos de su espacio me llamaron la atención, como las consejerías de aborto con pastillas que se hacían entonces.
 
En ese momento el gobierno de Cristina se enfrentaba al ataque de los fondos buitre, y recuerdo que eso me dio el empujoncito que faltaba para ir y ver en qué podía sumar, sin saber mucho de que se trataba esto de la militancia. Me encontré con gente muy comprometida, que aprendí a querer muy rápido, y acá estamos 10 años después. Un viaje de ida.
 
¿Cómo ves a tu Comuna en este momento?
 
Hay muchísimo por mejorar. La Comuna 3 es un buen reflejo de la Ciudad en general. Hay dos comunas, como hay dos Buenos Aires: una de Rivadavia hacia el norte, y otra hacia el sur. Claramente todas las gestiones del PRO gobernaron según esta división, con servicios diferentes, para ciudadanos de primera y de segunda. Todo cambia: la calidad de los espacios públicos, la seguridad, la gestión de los residuos.
 
Hay dos datos que dicen mucho de la Comuna 3: hoy es la más densamente poblada de toda la Ciudad - somos muchos en un territorio pequeño - y es la segunda comuna con menos espacios verdes por habitante, no llegamos ni a medio metro por persona.
 
Por otro lado, la identidad de los barrios de Abasto, Balvanera y San Cristóbal, sobre todo de este último, está hoy en plena disputa. Son zonas de altísimo valor patrimonial, que está siendo arrasado por el negocio inmobiliario del que es cómplice el Gobierno porteño. Destruyen obras que no tienen repuesto para construir torres en las que no vive nadie, que sólo se usan como reserva de valor.
 
¿Qué análisis haces de estos 12 años de descentralización?
 
El balance sin dudas es negativo. Durante los 12 años ha gobernado la Ciudad el mismo espacio político, con el mismo objetivo: no descentralizar nada. Nunca mostraron el mínimo interés por cumplir con lo que plantea la Constitución de la Ciudad o la ley de comunas. Desde esa primera camada de comuneros y comuneras hasta hoy, son cada vez menos las funciones descentralizadas. Sí es para destacar el compromiso de compañeros y compañeras de lo que es hoy el frente Unión por la Patria, que en sus gestiones lograron, pese a los palos en la rueda del Gobierno, poder representar y vehiculizar las propuestas de sus comunidades.
 
¿Pensás que la Ley 1.777 se cumple?
 
No se cumple con la ley, ni con lo que establece la Constitución porteña. No la respetaron ni Mauricio Macri ni Horacio Rodríguez Larreta. El primo Jorge Macri ya empezó con el pie izquierdo, con un mensaje muy claro: va a profundizar el camino de desguace de la Ley 1777. En el decreto 387/2023 ya asignó a la Secretaría de Gobierno y Vínculo Ciudadano parte de las tareas que venían realizando las Comunas, como el otorgamiento de permisos de uso y ocupación del espacio público, a lo que sumaron recortes en el ya escaso presupuesto.
 
¿Cuáles son tus proyectos para la Comuna?
 
Quiero promover iniciativas en dos grandes líneas de trabajo. Una que impulse propuestas para mejorar la calidad de vida en nuestros barrios, y otra que busque ampliar el conocimiento popular sobre la ley de comunas y la participación vecinal.
 
En el primer sentido, mi prioridad es trabajar para ampliar la oferta de espacios verdes. Tenemos, por ejemplo, pendiente de que se inicie la segunda parte de la obra del Parque de la Estación, que es un espacio precioso conseguido gracias a la participación vecinal y el impulso de la entonces comunera de mi partido, María Suárez. Necesitamos que avance ese proyecto, y multiplicarlo a otros rincones de la Comuna, que hoy son puro cemento.
 
Además, nos faltan muchísimos árboles, que harían una gran diferencia en estos días de tanto calor. Vamos a invitar a las y los vecinos a participar de ese relevamiento y exigiremos que no quede un cantero sin plantar.
 
Entre otros temas, empezamos a relevar junto a asociaciones la accesibilidad en el espacio público para personas con discapacidad, un tema en el que hay mucho por hacer. También es fundamental exigir la protección y puesta en valor de sitios de patrimonio histórico, como es el caso de la casona del arquitecto Virginio Colombo en la Avenida Entre Ríos.
 
Por otro lado, creo que es fundamental llevar adelante una política permanente de difusión en las vecinas y vecinos del rol de las comunas, que se conozca más el espíritu de la ley 1777, para construir una voluntad popular con la fuerza necesaria para exigir su cumplimiento absoluto. Aún hay mucho desconocimiento de qué podríamos lograr si se respetara la ley.
 
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