Por falta de financiamiento se demora la obra del ferrocarril Sarmiento

El jefe de Gobierno Jorge Macri busca financiamiento para el FFCC Sarmiento, pero aún no existe un proyecto final para el viaducto. Mientras se resuelve la cuestión, el Gobierno porteño avanzaría con pasos bajo nivel en Villa Luro y Caballito.
 
La obra del Sarmiento encierra varias complejidades. El ferrocarril y las vías pertenecen al Gobierno nacional y por eso cualquier modificación al trazado debe ser acordada previamente con el gobierno de Javier Milei. Por el momento la Ciudad no tiene los recursos para comenzar con la obra y los organismos internacionales aparecen como la única opción.
 
A pesar de varios anuncios, el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta nunca finalizó el proyecto para el viaducto. Eso habría permitido adelantar los tiempos: preparar la licitación de una iniciativa de esa magnitud puede llevar más de un año, informa La Política Online.
 
Durante la campaña, funcionarios cercanos a Guillermo Dietrich le acercaron el proyecto del viaducto y Jorge Macri se inclinó por esa posibilidad frente a la trinchera que proponía Martín Lousteau.
 
Otro inconveniente es el contrato firmado por 3 mil millones de dólares con la empresa Ghella, que quedó en suspenso. El acuerdo con Nación era para construir un túnel de Once a Moreno, la más cara de las soluciones, que por su costo quedó descartada. Pero los italianos, que le compraron el contrato a Odebrecht, no quieren dar por perdida la obra.
 
El último proyecto integral para el Sarmiento tiene casi 8 años e incluía que circulara por túneles como el que ya fue construido de Moreno a Ciudadela y que termina a pocos metros de la General Paz. Pero fue descartado porque cuesta casi 10 veces más que el viaducto.
 
El viaducto es el proyecto más realizable de los que hay en danza. La traza del ferrocarril tiene varias "interferencias" por debajo como caños maestros. Sortearlas podría incrementar los costos de la obra.
 
La trinchera permitiría contar con cuatro vías, dos de ellas para servicios expresos, y también que el Sarmiento funcione como una continuación de la línea A de subtes. Es la opción más amigable con el entorno y menos resistida por los vecinos y vecinas porque en lugar de un paredón de hormigón permitiría un parque lineal conocido como el corredor verde del oeste.
 
El problema es que la trinchera implicaría cortar el servicio entre 18 y 24 meses. De todas formas, ninguna de las opciones podría quedar terminada antes del fin del mandato de Jorge Macri. Para que eso ocurriera, a esta altura, deberían estar cerradas las licitaciones.
 
Durante su discurso en la Legislatura, Macri anticipó que el viaducto del Sarmiento no estaba decidido. En cambio, adelantó que habría seis nuevos pasos a nivel. Uno sería en la calle Irigoyen en Villa Luro y otros dos en las calles Lorca y Morelos en Caballito.