La comuna 10 repudia la prisión domiciliaria para uno de los jefes de Orletti

Esta semana la Sala de Feria de la Cámara de Casación, decidió otorgarle el beneficio de prisión domiciliaria al represor Eduardo Rodolfo Cabanillas, uno de los jefes del Centro Clandestino de Detención Automotores Orletti.
 
Comuneros, referentes y militantes de distintas agrupaciones y partidos políticos de la Comuna 10, rechazan y repudian el beneficio a prisión domiciliaria para Eduardo Rodolfo Cabanillas, uno de los jefes del Centro Clandestino de Detención Automotores Orletti.
 
La comunera por el Frente para la Victoria Cynthia Salama explica a Nueva Ciudad que “a pesar de estar condenado a cadena perpetua por delitos de lesa humanidad, Cabanillas es uno de los 50 militares que, desde que asumió Mauricio Macri, cumple la condena en su casa. Creemos que esto representa un gravísimo retroceso en la política de Derechos Humanos que llevaron adelante los Kirchner, volvemos a exigir cárcel común, perpetua y efectiva para todos los genocidas de la última dictadura cívico – militar”.  
 
Salama presentará a la Junta Comunal 10 un proyecto para que se declare a Eduardo Rodolfo Cabanillas, persona no grata en la Comuna 10. “Entiendo que tenemos la obligación de pronunciarnos al respecto. Propongo utilizar la herramienta de la democracia que tenemos a nuestro alcance y declarar a este individuo persona no grata en la Comuna 10, ojalá cuente con el acompañamiento de todos”, dice la juntista.   
 
Cabanillas fue uno de los dos capitanes destinados en la SIDE a cuyas órdenes se encontraba el CCD llamado por los represores “El Jardín” y más conocido como Automotores Orletti.  Al momento de su destitución, en junio de 1999, era Jefe Segundo del Cuerpo del Ejército con sede en Rosario.
 
Hijo del Coronel Héctor Cabanillas que dirigió el secuestro y entierro clandestino en Milán del cadáver de Eva Perón y fundador de la agencia de seguridad y vigilancia ORPI SA, que fue durante muchos años la más grande en su rubro.
 
Eduardo Cabanillas fue el de más rango de los condenados en el juicio que terminó el  jueves 31 de abril del 2011, junto a Honorio Martínez Ruiz, Eduardo Alfredo Ruffo y Raúl Guglielminetti. Fue el único condenado a prisión perpetua e inhabilitación absoluta por cinco homicidios. La imputación contó además 29 secuestros. Entre sus víctimas estuvieron lo que se conoció como los cinco tambores del río Luján, un grupo de prisioneros arrojados en recipientes en octubre de 1976, descubiertos por un prefecto e identificados en 1989. Entre ellos estaban los mellizos Gustavo y Ricardo Gayá, Marcelo Gelman, Dardo Albeano Zelarayán y Ana María del Carmen Pérez, con un tiro en la panza, con un embarazo de nueve meses.
 
En aquel proceso quedó establecido que Cabanillas fue jefe del CCD Orletti, sede del Plan Cóndor en Argentina y nexo de la cadena de mandos que hacia arriba tenía a Otto Paladino y hacia abajo a la patota operativa de Aníbal Gordon, Ruffo, Martínez Ruiz y Guglielminetti.