- Opinion
- 18.01.2017
OPINIÓN
La crónica de la semana (del país que creció sin crecer a la coima invisible)
Desde las asombrosas declaraciones del Presidente en su última conferencia de prensa hasta el caso Nisman, pasando por las andanzas de su alteza Gerardo I.
Terminamos otra semana trepidante en la que no tuvimos noticias de la lluvia de inversiones pero tampoco de la Pobreza Cero; es decir, una de cal y otra de arena. Además, como nos enseñaron que los futuros venturosos se consiguen con presentes calamitosos, no perdemos nuestro optimismo. Del apocalipsis kirchnerista, inminente aunque siempre esquivo, pasamos así a la lluvia de inversiones, tan inminente e igual de esquiva.
En una asombrosa conferencia de prensa, Mauricio Macri afirmó que el 2017 “va a ser el primer año que vamos a volver a crecer, después de más de cinco años”. Al parecer, nuestro presidente tampoco le cree al INDEC de Todesca, según el cual crecimos 2,1% en el 2015 y, salvo en el 2014, tuvimos crecimiento desde el 2010. También defendió al jefe de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Gustavo Arribas, denunciado por recibir 600 mil dólares de Leonardo Meirelles, un cambista brasileño condenado en su país por el pago de coimas. Explicó no entender “cómo se relaciona Arribas con Odebrecht” con la misma convicción con la que afirmó hace un tiempo que “está bien que Milagro Sala esté detenida porque la mayoría cree que cometió delitos”. Le aconsejamos, para entender, que lea a Hugo Alconada Mon, aunque no debería preocuparse demasiado: según opinó el juez Canicoba Corral "no sé si se puede hablar de sobornos ya que (Arribas) no era funcionario en el momento de los hechos”. Tampoco Lázaro Báez lo era y sin embargo está en preventiva desde abril del 2016. Es complicado, como diría Hermes Binner.
Desde el gobierno de la CABA, Horacio Rodriguez Larreta afirmó que “todos somos inocentes hasta que se pruebe lo contrario” . Ocurre que el caso Arribas ha conseguido que el oficialismo descubra la hasta ahora olvidada presunción de inocencia, un pequeño milagro que debemos saludar.
Hace unos días, su alteza Gerardo I, emperador del Sol Poniente por la gracia de los Blaquier, mariscal del Altiplano, protector de la Justicia, orgullo radical y azote de Dios, presidió los festejos correspondientes al primer año de preventiva de Milagro Sala. Los jóvenes idealistas de Franja Morada no pudieron contener las lágrimas de emoción cuando la Fundación Kunta Kinte, cercana al Momo Venegas, hizo una suelta de esclavos frente al monarca, mientras la policía llevaba a cabo un espectáculo de palos y gases sobre algunos transeúntes con cara de pertenecer a la Tupac. Otra Argentina es posible.
Por su lado, José Luis Espert, miembro honorario de la Fundación Gorilas en la Bruma, explicó sobre los peronistas: "Hay que encerrarlos y decirles basta”. La inacción de la Justicia está generando impaciencia, aún entre los miembros más mesurados de nuestras fuerzas vivas.
Luego de investigar durante diez años, con un equipo amplio y recursos generosos, Alberto Nisman sólo presentó una denuncia creativa sobre hechos ocurridos veinte años después del atentado a la AMIA. Este resultado anoréxico y los avances conseguidos por sus reemplazantes- como el descubrimiento de nuevas pruebas o la identificación de la víctima 85 no parecen atenuar la pasión de quienes piden canonizarlo, a la vez que exigen que CFK vaya presa, por esa denuncia o por el ya indudable asesinato del fiscal.
La DAIA advirtió que “la investigación por la muerte de Nisman no se puede dilatar más”, mientras que la jueza federal y ex esposa del fiscal, Sandra Arroyo Salgado, espera “que dictaminen con valentía, independencia y rigor científico que Alberto Nisman fue víctima de un homicidio.”. Ya saben que fue asesinato y tienen a la culpable, sólo necesitan a los peritos adecuados y al juez idóneo. En todo caso, esperamos que esta vez la Justicia investigue a fondo la pista del comando venezolano-iraní con formación en Cuba Libre y la del piolín ruso.
La conjunción de nuestra Justicia Fabio Zerpa, la creatividad de los servicios y la falta de buenas noticias desde el gobierno, nos augura un año de Nismanía desenfrenada. Pero no todas fueron malas noticias: apartándose de su tradicional mesura oficialista, Margarita Stolbizer envió un “furioso tuit contra los controles migratorios que quiere endurecer el Gobierno”. Si el gobierno persiste en esa línea, la diputada no descartó mandar un emoticón enojado. O incluso dos.
Todo lo que quieran, pero ya no le tenemos miedo al censista.
COMENTARIOS