El barrio de La Boca resulta inaccesible para personas con movilidad reducida

Los típicos escalones que presentan las veredas del barrio de La Boca son otro de los obstáculos que, junto a la falta de rampas, deben sortear a diario los vecinos que allí habitan. Pero no sólo en las veredas aparecen los problemas en el momento de movilizarse: cuando se transita en silla de ruedas, también los hay en la calzada, donde predominan los adoquines.
 
"La Boca resulta totalmente inaccesible para las personas con discapacidad motriz o movilidad reducida", sentencia a La Nación Dinah Schonhaut, directora de Acceso Ya, la ONG que trabaja por la inclusión de las personas con problemas para desplazarse mediante la promoción y la defensa jurídica del derecho a la accesibilidad. Según el último relevamiento de la entidad, en ese barrio de la Comuna 4, abundan las veredas angostas, que, además de estar en mal estado, no permiten por su tamaño la circulación de sillas de ruedas.
 
En Caminito, una de las principales atracciones turísticas, los negocios ocupan toda la vereda y complican la circulación de los transeúntes.
 
Desde el Ministerio de Ambiente y Espacio Público de la Ciudad reconocen los problemas de La Boca, aunque los atribuyeron a razones "estructurales", fundamentalmente vinculadas a motivos topográficos e históricos. Originalmente, el barrio fue una zona pantanosa, con lagunas y pajonales y, por lo tanto, pasible de frecuentes inundaciones. Es eso, y no otra cosa, según el Gobierno porteño, lo que determina que veredas y calles antiguas, empedradas y desniveladas sean la regla.
 
Según los informes oficiales, La Boca está elevada dos metros en promedio y emparejar el barrio para hacerlo 100% accesible haría que se anegaran los barrios contiguos. Además existen áreas declaradas de protección histórica, que no permiten modificación alguna. A pesar de eso, para este año, el Gobierno de la Ciudad tiene prevista la ejecución de unas 320 rampas en todas las ubicaciones en que las veredas así lo permitan.
 
En cuanto al resto de la Comuna 4, integrada por los barrios de Barracas, Parque Patricios y Nueva Pompeya, el Gobierno porteño proyecta ejecutar otras 1600 rampas para darle accesibilidad total.
 
Según el Ministerio de Ambiente y Espacio Público porteño las comunas 5 y 6 son 100% accesibles.  Según la dependencia oficial, una comuna es completamente accesible cuando todas sus esquinas cuentan con, por lo menos, una rampa. Pero aclaran que, en algunos casos, no se pudieron hacer dos rampas por intersección debido a la presencia de interferencias de difícil resolución, como por ejemplo un poste, alguna señal o un cantero, entre otros motivos.
 
En la Comuna 5, que abarca los barrios de Almagro y Boedo, en 2016 se ejecutaron, arreglaron y pusieron en valor 670 rampas. En tanto, en la Comuna 6 de Caballito, durante el último año se ejecutaron, arreglaron y pusieron en valor 523 rampas .
 
Para el año en curso, desde el Ministerio de Ambiente y Espacio Público informaron que se prevé hacer 100% accesibles las Comunas 8 (Villa Soldati, Villa Lugano y Villa Riachuelo), 9 (Parque Avellaneda, Mataderos y Liniers), 12 (Saavedra, Coghlan, Villa Urquiza y Villa Pueyrredón), 13 (Núñez, Belgrano y Colegiales) y 14 (Palermo).