La Biblioteca Becciú cumplió 100 años en La Paternal

La Biblioteca Becciú está ubicada en su domicilio definitivo, en el pasaje Nicolás Granada 1660, desde hace más de 50 años. La casa fue una donación de un vecino a la Asociación Florencio Sánchez, con el nombre con que nació la biblioteca. Nueva Ciudad estuvo charlando con Norberto Zanzi, el presidente de la Comisión Directiva, quien nos contó algunos secretos. 
 
¿Cuál es la historia de la Biblioteca Becciú?

La Biblioteca cumplió 100 años el año pasado. Cuando se fundó estaba en la avenida San Martín 3121, luego pasó a Paysandú 1678 y terminó en la ubicación actual de pasaje Nicolás Granada 1660.
Nació como la Asociación Cultural Florencio Sánchez y después se agregó Biblioteca Becciú.
El barrio tiene 112 años, la ex Liga Israelita y el cine-teatro Taricco tienen noventa y pico de años y la Biblioteca cumplió 100, todos se fundaron más o al mismo tiempo, acompañando a la fundación del barrio.  
Esta casa es propia, ahora la estamos pintando, arriba se aumentó la loza, la idea es hacer un gran SUM arriba para organizar festivales.
La Biblioteca es totalmente popular, es gestionada por una Comisión Directiva conformada por vecinos, no pertenece al Estado, como fin tiene llevar la cultura y la lectura a la gente, eso no quita que haga también otras actividades culturales.
Es una biblioteca bastante grande, actualmente tiene 25.000 volúmenes. Participa siempre de las actividades del barrio, acá se reúne el Grupo Taricco, que es el que quiere recuperar el cine-teatro Taricco, antes se reunía la Comisión de Fresedo, siempre que tenga algún roce con lo cultural. Los últimos tres años se hizo acá el festejo del aniversario de La Paternal, el 12 de julio.
 
¿Qué concurrencia tiene la Biblioteca?

En el último tiempo cayó bastante, en cuanto a los socios y a la lectura en general de este tipo de cosas. Todo lo que es digital ha sacado a la gente de todo esto, desde la televisión, los videos hasta los celulares, los libros electrónicos, la computadora. En este momento la Biblioteca tiene 50 socios activos, queremos que los socios aporten ideas.
Lo que hay que hacer es cambiar la perspectiva de lo que es la biblioteca y eso es lo que estamos tratando de hacer como las visitas de chicos de las escuelas primarias de la zona. Se prepara con la maestra o bibliotecaria un tema y los chicos vienen acá, lo desarrollan y así se acercan a la lectura y a la Biblioteca. También vamos a las escuelas, se sale a la calle, vamos a la Carbonilla, llevamos los libros a todos los lugares posibles.
Hubo un tiempo que armamos la Biblioteca ambulante que llevaba los libros a los domicilios, incluso había gente que leía para gente que no podía hacerlo, por tener una edad avanzada o una enfermedad. Este tipo de cosa hay que reactivarlas. Tratamos de cambiar, pensando, para acercar la gente a los libros.
 
¿De cuánto es la cuota y que requisitos se necesitan para hacerse socio?

La inscripción es de $ 30 y la cuota mensual es de $ 20. Los requisitos son presentar el DNI y un impuesto para acreditar domicilio, con esto se pueden llevar hasta tres libros por mes a los hogares. A los chicos de la Carbonilla no se les cobra nada y solo se necesita la firma de algún adulto responsable. La idea es que los chicos vengan y estudien acá.
 
¿Hay bibliotecario?

Sí, tenemos dos bibliotecarios, uno a la mañana y otro a la tarde. Sus sueldos salen de un subsidio que nos otorga el Gobierno de la Ciudad.
Hacia el fin del año pasado cambió la Comisión Directiva de la Biblioteca, somos 14 miembros, yo soy el presidente. Hay mucho entusiasmo por parte de los socios, esperamos avanzar, la gente está dispuesta a hacer cosas.  
 
¿Cómo se mantiene la Biblioteca y como consiguen los libros?

A través de subsidios que otorga el Gobierno de la Ciudad y con el aporte de los socios. Los libros los recibimos por donaciones de vecinos y editoriales o por la compra a través de subsidios. Cuando viene la Feria del Libro nos dan un subsidio especial y a su vez compramos a las editoriales con el 50% de descuento, entonces el subsidio rinde mucho más. Nosotros estamos en dos grupos: el nacional que es la CONABIP (Comisión Nacional de Bibliotecas Populares) y en La Casa del Libro que es de la Ciudad.
La Biblioteca paga todos los servicios como luz y agua, no tenemos ningún subsidio. El Gobierno de la Ciudad instaló acá un equipo para dar wi-fi al barrio, pero no nos pagan nada y consume nuestra electricidad.
 
¿Qué otras actividades tienen además de la biblioteca?

Tenemos computación, los socios pueden venir a utilizar las computadoras que tienen internet de forma gratuita. También hay talleres arancelados pero con una cuota muy baja, tenemos taller de italiano, de inglés, de memoria, de grafología y de computación.
Lo malo de esto es que estamos ubicados en un pasaje poco conocido, metidos para adentro  y eso que estamos en el centro del barrio.
Desde hace unos años hay escuela primaria para adolescentes y adultos, funciona en dos turnos, uno de 8 a 10 de la mañana y el otro de 10 a 12 del mediodía. Vienen desde chicos de 16 años hasta personas de 80. El segundo turno está más dedicado a chicos con necesidades especiales. Esto es un programa del Gobierno de la Ciudad, nosotros prestamos las instalaciones pero no recibimos ningún pago a cambio. Tenemos gastos como la electricidad y la limpieza.
 
Horario de funcionamiento:
De lunes a viernes de 10 a 13 y de 15 a 18.30 hs.