Promesas en el viento

La promesa fue rutilante. Y convocó a la esperanza de quienes la perdieron por el maltrato del Estado. El jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, se comprometió a urbanizar todas las villas de la Ciudad, en una medida que buscaba diferenciarlo de su antecesor, el actual presidente Mauricio Macri. En rigor, no es la primera vez que un jefe de Gobierno prometía esto. Sin buscar muy atrás en el tiempo, Macri en 2007 durante la campaña en la que resultó electo prometió lo mismo. Está claro que el líder del PRO no sólo no cumplió, sino que subejecutó y recortó el presupuesto en vivienda de manera sistemática en sus ocho años de gobierno. Ahora le toca el turno de pasar la prueba de las promesas a Larreta: el Observatorio de Derechos Humanos (ODH) hizo un pedido de información pública para saber cómo vienen las obras en la villa 31, en la 20, en la Rodrigo Bueno y en Chacarita. La respuesta del Instituto de la Vivienda de la Ciudad (IVC) es que no se terminó una sola vivienda en estos dos años de gobierno de Larreta.

La subejecución en el área de vivienda fue una marca del PRO durante todo el gobierno de Macri, en el cual –recordemos, por las dudas- Larreta fue jefe de Gabinete. De hecho, fue el encargado en 2007 de anunciar que aquel Macri recién electo jefe de Gobierno tenía en sus planes la urbanización de las villas (en ese momento, era solo las del sur, porque para la villa 31 preveían su erradicación). Larreta prometió cambiar esa lógica, se comenzaron a ver obras en la 31 y en el barrio Papa Francisco y hubo una inyección de ingresos al área de vivienda en el Presupuesto 2017. Desde la oposición, señalaban que sólo se avanzaba en aquellos lugares donde había un proyecto inmobiliario de fondo. No obstante, las obras prometían. En un informe especial de Nueva Ciudad dimos cuenta de la situación en los barrios, con sus claroscuros.

El ODH presentó un pedido de información pública para conocer cómo venía la construcción de nuevas viviendas y la regularización dominial en tres lugares específicos: la villa 20 –próxima a la Villa Olímpica que construyeron para los Juegos Olímpicos de la Juventud de este año-, el playón de Chacarita y la Rodrigo Bueno, que también en su momento querían desplazar y finalmente aceptaron urbanizar (algunos dicen que como paso previo a aprobar el proyecto del barrio Solares de Santa María), y por las villas 31 y 31bis. La respuesta del Gobierno porteño al avance de las obras los sorprenderá.

* Villa 31: el IVC respondió que no es un ámbito de su competencia, por lo que no brinda información al respecto. El macrismo creó una unidad especial, a cargo de Diego Fernández, para la urbanización de esa villa. En Nueva Ciudad, le hicimos esta entrevista a Fernánedz, que es secretario de Integración Social y Urbana.

* Rodrigo Bueno: El IVC señaló que en marzo de este año recién comenzaron las obras para hacer viviendas nuevas. Tienen plazo para terminarlas para mayo de 2019, aunque es sabido que se suelen retrasar.

* Playón de Chacarita: También indicaron que las nuevas viviendas comenzaron en marzo de este año, de nuevo con plazo para mayo del año que viene (coincidente con la campaña porteña). Están planificando mejorar las viviendas que sean habitables, pero todavía no se iniciaron esas obras. Recordemos: Larreta lleva la mitad de su mandato cumplido. “Actualmente se han realizado el 70 por ciento de las obras provisorias del barrio (obras de cloaca, agua, pluvial y nivelación de piso de emergencia, no son las definitivas). Además, se realizó la apertura de las calles Teodoro García y Avenida Triunvirato”, plantearon a su favor en el IVC.

* Villa 20: El IVC, en dos años de Gobierno de Larreta –y más de una década del PRO- comenzó un relevamiento de las necesidades del barrio: en el documento informa que va por la mitad. El mismo avance tiene el proyecto de cómo serán las manzanas del barrio y dónde abrirán calles. Prometen que en agosto de este año entregarán las primeras viviendas del barrio Papa Franscico, pegado a la Villa 20. Sobre otras obras necesarias, aclararon: “Este Instituto no ha desarrollado obra de infraestructura en el Barrio 20 en los últimos dos años”.

En conclusión, el IVC señala que hay obras en ejecución, pero que “en los últimos dos años, no se construyeron viviendas”. También indica que “no se ha procedido a realizar la regularización dominial de ningún habitante de los barrios se encuentra en pleno proceso de reurbanización”. Sobre la ejecución de las obras en 2018, lo esperable es que a esta altura del año, se acercase al 50 por ciento. No es así: según los datos brindados por el IVC, para la Rodrigo Bueno la ejecución actual es del 18 por ciento; para la Villa 20, se ejecutó el 23 por ciento del presupuesto mientras que para el Playón de Chacarita, la ejecución es de un magro 9 por ciento. Esos números dicen bastante sobre el cumplimiento de las promesas.

Desde el ODH, señalaron sobre estos datos brindados por el oficialismo que “implican una incoherencia notable entre el discurso público y la praxis concreta por parte del gobierno de la Ciudad”. “Ha subejecutado notablemente el presupuesto destinado para cada una de las villas. Estos son los hechos irrefutables de una gestión que sigue siendo excluyente aunque declame lo contrario. Ojalá fuera solo una incoherencia entre discurso y hechos. Es mucho peor: se constata la vigencia de la violación del derecho a la vivienda digna de los habitantes de las villas, consagrado en el artículo 31 de la Constitución porteña hace 22 años, por el que desde el ODH seguiremos bregando hasta que se urbanicen todas las villas”.