Proyectan obras en la cuenca del arroyo Medrano para evitar inundaciones

El Medrano es el segundo arroyo entubado más importante de la Ciudad y un dolor de cabeza para los vecinos de Saavedra, Núñez y Villa Mitre cada vez que llueve. En 2013 colapsó y dejó seis muertos durante un temporal en el norte porteño. El plan para solucionar las inundaciones en esa zona viene muy demorado, informa Clarín.
 
Sólo una tercera parte de la cuenca está en suelo porteño: los otros dos tercios corren por territorio bonaerense, desde los partidos del noroeste como Tres de Febrero y San Martín hasta Vicente López. En febrero de 2016 se conformó el Comité Interjurisdiccional de la Cuenca del Arroyo Medrano (CICAM) con todos los niveles estatales involucrados.
 
El CICAM trabaja para obtener un préstamo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para la obra mayor del Medrano, la de su segundo emisario, al tiempo que avanza en los estudios para armar su master plan, con detalles y fechas. Mientras tanto se hicieron obras anexas previas, para las cuales se obtuvo un financiamiento por $ 40 millones, después de un convenio firmado con la Subsecretaría de Recursos Hídricos de la Nación.
 
Una de esas obras anexas fue la colocación de cuatro sifones bajo las calles Holmberg y Tronador, a ambos lados del paso bajo nivel de Balbín, para captar el agua de lluvia y conducirla hacia el emisario principal del Medrano, que corre debajo de la avenida Ruiz Huidobro. Los trabajos estarán terminados a fines de este mes, indicaron a Clarín desde el Ministerio de Desarrollo Urbano y Transporte porteño.
 
A su vez, se aprobó un acuerdo con el Fondo Hídrico Nacional para otra obra del Medrano: la de eficiencia de su primer emisario. Esta consiste en la colocación de tabiques entre columnas a lo largo de todo el arroyo entubado, especialmente en los tramos 2 y 3, que son los que corren desde la General Paz hasta Cabildo. Estas columnas sostendrán el piso y las paredes, de manera de abrir el ducto, dado que el entubamiento tiene más de un siglo y hay partes que se desmoronaron. La obra está en etapa de licitación y arrancaría en septiembre.
 
Según un estudio de la Universidad de La Plata, estas mejoras aumentarían entre un 10% y un 20% la capacidad del Medrano de conducir agua, y ayudarían a que se junte menos basura. Ambas son condiciones clave para que el agua escurra rápidamente hacia su destino final, el Río de la Plata.