La Manzana de las Luces en estado de total abandono

La fachada de La Manzana de las Luces, ubicada en Perú 222, en el barrio de Monserrat exhibe síntomas de un abandono avanzado, tiene desprendimientos, humedad, suciedad y grietas con vegetación. Este edificio fue construido entre 1730 y 1862, hoy permanece cerrado al igual que sus túneles coloniales subterráneos.
 
La Compañía de Jesús comenzó su construcción para alojar a la Procuraduría de las Misiones. El arquitecto a cargo del proyecto fue Juan Bautista Prímoli. En el siglo XIX el edificio fue sede de la Universidad de Buenos Aires y del Museo de Ciencias Naturales. A seis metros de profundidad corren túneles coloniales.
 
La Manzana de las Luces es el edificio más antiguo de la Ciudad, junto con algunas iglesias. La manzana fue bautizada “de las luces” en 1821 por el diario El Argos porque concentraba instituciones como la biblioteca, la UBA y el Colegio San Carlos. En 1925, Albert Einstein dio conferencias y mantuvo reuniones con otros científicos. En 1966, se produjo la Noche de los Bastones Largos, cuando el dictador Onganía ordenó desalojar la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales. Otro dato curioso es que allí se instaló la primera computadora que funcionó en Argentina.
 
En 1967, las facultades que funcionaban en La Manzana de las Luces comenzaron a mudarse a Ciudad Universitaria. El edificio fue declarado Monumento Histórico Nacional en 1981, cuando ya había sufrido la primera mutilación en 1937, cuando la esquina de Perú y Alsina fue reconvertida para instalar el monumento a Julio A. Roca. Su fachada actual fue rediseñada en 1862, durante la presidencia de Bartolomé Mitre, para alojar a la UBA.
 
Desde 1971, el Complejo Histórico Cultural Manzana de las Luces, que depende de la ahora Secretaría de Cultura de la Nación, tiene entre sus objetivos la conservación y restauración de los edificios históricos del sitio. Desde Cultura explicaron a La Nación que están gestionando un fondo a la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos para la restauración y la puesta en valor de las fachadas y cubiertas del Complejo.
 
Desde Cultura revelaron que en breve se comenzará con la actualización de la instalación eléctrica y que en el terreno donde funcionaba un estacionamiento se abrirá una plaza pública. Además, prometen que en noviembre se reabrirá el acceso a los túneles subterráneos.