Lejos de Macri: la estrategia de Larreta para mantener su meta de ganar en primera vuelta

Las marchas del sábado en apoyo al presidente Mauricio Macri no modificaron el plan del actual jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, en su intento por despegarse de la campaña nacional y ser reelecto, de ser posible en primera vuelta. La estrategia que se definió tras las elecciones primarias –y que comparte con su par bonaerense, María Eugenia Vidal- es despegarse tanto como se pueda del plano nacional.

Así, tanto Larreta como Vidal apostarán por lo local y evitarán nacionalizar la contienda. Según consignó Clarín –entre otros- en el equipo de campaña de Larreta, a cargo del ministro de Espacio Público Eduardo Macchiavelli, apuestan a municipalizar lo más posible la campaña. Tal como lo hicieron de cara a las PASO, pero potenciando ese perfil.

En un primer momento estaba previsto que Larreta y Vidal realizaran anuncios en conjunto como forma de seducir a los desencantados de la clase media. Pero ese plan fue descartado: el Gobierno de la Ciudad comunicará facilidades a través de su banco oficial.

Esta estrategia contempla también que Martín Lousteau se dedique más a la Ciudad, ya que no tiene tanto peso en la provincia de Buenos Aires. En tanto, el vicejefe Diego Santilli coordina la mesa para levantar el sur de la Ciudad. Esto tiene que ver con que el PRO nunca había tenido tanta diferencia –alrededor de 30 puntos- entre la zona con más votos –Recoleta- y la de menos –Mataderos-. Además, en las comunas 8 y 4 se impuso el principal opositor, Matías Lammens.

A todo esto, Larreta se cierra también sobre lo local porque ya dejó en claro que, ante la prevista derrota nacional y provincial, no habrá lugar para todos los gabinetes en el ámbito porteño. En una reunión de gabinete tras las PASO, según consignó Página 12, el jefe de Gobierno dejó en claro que si conserva el Gobierno de la Ciudad y caen Nación y Provincia, él va a "cuidar a su propia gente". Es decir, no habrá lugar para todos los que quieran retornar a la Ciudad. Aquellos que en 2015 se fueron con Macri y Vidal y obligaron a Larreta a armar su equipo con las terceras y cuartas líneas. "Hoy esos jóvenes tienen cuatro años de gestión. ¿Qué hacemos? ¿Los descartamos?", se preguntan en la sede de Parque Patricios. La respuesta, en principio, es que no.