Rodríguez Larreta reforzó los contactos con Vidal y piensa en la era post Macri

La reunión que este sábado mantuvo el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, con vecinos de Coghlan fue el puntapié para el resto de la campaña, que apunta a saturar las calles, redoblar los esfuerzos hechos ante las elecciones primarias y poner todo el aparato a disposición de un objetivo: ganar en primera vuelta en octubre. Pero además, el futuro cercano del mandamás porteño incluye más vínculo con la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, y tanta distancia como sea posible de la campaña presidencial de Mauricio Macri.

Según consignó el diario La Nación, en los últimos días Larreta reforzó los contactos habituales que mantiene con Vidal. Ambos apuntan a una campaña que no se base en acusar a Alberto Fernández como responsable de la crisis, y en cambio tienden algunos puentes con referentes del Frente de Todos.

En esa línea, ninguno de los dos tuvo participación activa en la marcha del sábado 24, de apoyo a Macri, que terminó con el Presidente en el balcón de la Casa Rosada. "No sirvió para nada, son los que ya nos iban a votar. Al contrario, fue peligroso: si de 8 millones que te votaron no podías llenar la plaza te tenías que ir", reflexionó un dirigente larretista, de acuerdo al matutino.

En tanto, Larreta inició ayer la etapa de “saturación” de cara a octubre. “La mejor manera de trabajar en la Ciudad es escuchando a los vecinos”, dijo en Coghlan, donde escuchó las propuestas y reclamos del barrio.

"Para las PASO nos relajamos", dijo a Infobae un funcionario de Larreta. Por caso, hubo solo 15 mesas por comuna, mientras que en las elecciones de 2017 se desplegaron 100. En el entorno del jefe de Gobierno aseguran que fue una estrategia: una campaña sin demasiada presencia callejera. A la inversa, ahora el plan incluye más recorridas, más territorio, más reuniones con vecinos. Más presencia en la calle. Sobre todo en los barrios del sur y muy especialmente en las comunas 4 y 8, donde se impuso Matías Lammens.