EDUCACIÓN

Cayó parte de un techo en un aula de primer grado del Polo Educativo Mugica

Ocurrió de noche, durante la tormenta. Además, hubo filtraciones de agua en todos los pisos. El complejo fue inaugurado en junio, en Retiro, como una de las obras emblema de la gestión de Larreta y Acuña.



"Podría haber sido una tragedia pero por suerte pasó de noche”, dijo un trabajador del Polo Educativo Mugica, en Retiro, donde durante la tormenta cayó parte de un techo en un aula de primer grado.

El dato y las imágenes fueron difundidos por el periodista especializado en educación Martín Suárez. “Además se inundó gran parte de la escuela. El agua ingresó por los techos. No es la primera vez que se desploma un techo del polo Mugica. Ya en julio de este año, a menos de un mes de la inauguración, ocurrió lo mismo cuando los alumnos no estaban en el aula”, señaló.

El agua, según contó, ingresó por el tercer piso, inundó el segundo y el primero, donde se desplomó el techo, y llegó hasta el aula de música que se encuentra en planta baja.



El Polo Mugica es una de las obras consideradas emblema por la gestión de Soledad Acuña al frente del Ministerio de Educación porteño. Fue inaugurado en junio y presentado como un moderno complejo educativo, el más grande de la ciudad.

Pero desde entonces quedó en medio de varias polémicas. No sólo por las carencias en materia de infraestructura. También, por caso, por las dificultades de acceso para nenes y nenas de jardín y primaria, ante el cercado instalado en beneficio de funcionarios judiciales de Comodoro Py.

Al respecto, el Ministerio Público de la Defensa (MPD) solicitó al Ministerio de Educación porteño que informe qué medidas adoptó para retirar el alambrado que transformó la calle Letonia, por la que se accede a las escuelas del Polo, en estacionamiento de los funcionarios judiciales. El cerco implica que nenes y nenas deban caminar 200 metros bajo la lluvia –como se ve en el video que circuló en los últimos días- y obstaculiza el ingreso de ambulancias o bomberos, por caso. La denuncia había sido hecha por la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE), que recurrió a la Defensoría ante la falta de respuesta.

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