Marcha plurinacional y feminista contra toda forma de violencia machista y cisheteropatriarcal

Este año, la marcha por el Día Internacional contra las Violencias fue multicolor. Una multitud de mujeres y disidencias marchó por el microcentro porteño en el marco de una “Jornada de lucha continental, plurinacional y feminista contra toda forma de violencia machista y cisheteropatriarcal”. Al reclamo contra la violencia machista se sumaron otros: el repudio al golpe de Estado en Bolivia y el abrazo a la lucha del pueblo chileno.

Hubo consignas por los derechos de mujeres, lesbianas, trans, bisexuales y no binaries, embanderadas de forma plurinacional. En el documento que se leyó en el cierre, en Plaza de Mayo, se reclamó “basta de criminalización, asesinato, persecución a nuestro hermano pueblo boliviano” y se apoyó “la lucha chilena que no cesa, a pesar de las cacerías de pacos y milicos” bajo el gobierno de Sebastián Piñera.

Tal como consignó Página 12, la mayoría se concentró en la esquina de Corrientes y San Martín, mientras que otros grupos se reunieron en el Congreso, para luego confluir ambos hacia el Obelisco y movilizarse hasta la Casa de Gobierno.

Además de pañuelos verdes y las banderas de la Campaña Nacional por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito hubo banderas de Bolivia y de Chile, que flamearon ruidosamente ante las sedes de la Embajada de Bolivia y el Consultado de Chile. Situadas ambas en el microcentro de la Ciudad de Buenos Aires.

La marcha fue convocada por la Asamblea Feminista Autoconvocada, en contra del golpe, a favor del pueblo chileno y en la Argentina, porque “el aborto legal sea ley de una vez por todas, contra el ajuste, la represión de las fuerzas de seguridad y los despidos”. En el documento que se leyó en la Plaza de Mayo, con Nora Cortiñas, de Madres Línea Fundadora como figura central, se denunciaron “las prácticas de tortura, ultraje, violación y violencia sexual que aún siguen vigentes en Chile” y “la criminalización y hostigamiento que apuntan directamente contra los Derechos Humanos de mujeres y disidencias sexuales”. Además del reclamo por el aborto legal en la Argentina, en el documento exigieron la aplicación en todo el territorio del Protocolo por la Interrupción Legal del Embarazo (ILE) y denunciaron al presidente Mauricio Macri por haberlo derogado por decreto.