Más problemas en educación que nunca

Vamos a hacer el intento de repasar algunos de los problemas que se vienen acumulando en el sistema educativo de la Ciudad. “Si querés ganar una campaña, mantenete alejado del sistema educativo”, le recomendaba un asesor al alcalde de la serie The Wire. Bueno, acá no hubo nada como mantenerse alejados, sino que en el primer mandato de Horacio Rodríguez Larreta no dejaron conflicto por acometer. Y así y todo, ganó con el 55 por ciento de los votos.  No obstante, los votos no borran los problemas existentes: tenemos una paritaria docente que arrancó a días del comienzo de clases, una falta de vacantes por miles que se repite año a año y que dejó cien estudiantes afuera del Yrurtia, denuncias de desfinanciamiento de los CPIs –con los que el Gobierno porteño viene intentando tapar la falta de vacantes en nivel inicial- y de un programa educativo para que los estudiantes lean críticamente los medios de comunicación. Ah, sí: y la escuela de la Villa 31, que tiene un alambrado para que no molesten a los autos de los jueces, sigue alambrada. Ahora, ni le contestan a la jueza que lleva una causa por ese tema.

Empecemos por los gremios docentes. La ministra de Educación, Soledad Acuña, los convocó a una primera reunión a días del comienzo de clase y no les hizo ninguna propuesta salarial. O sea: lo ideal para un comienzo de clases tranquilo. “Un poquito tarde, ¿no? Más cerca del no inicio”, la toreó por Twitter el rerente de Ademys Jorge Adaro. Los gremios docentes ya observaron que el Gobierno de Larreta quiere condicionar el aumento a los docentes al recorte que efectúe Alberto Fernández de la coparticipación porteña. ¿Qué tendrá que ver la velocidad con la licuadora? En la segunda reunión, les ofrecieron 2400 pesos y los docentes lo rechazaron por insuficiente. Aunque las clases van a empezar, las posibilidades de un conflicto se multiplican.

Pero esto no es todo (voy avisando), este comienzo de clases lo tenemos con una denuncia por el vaciamiento del programa Medios en las Escuelas que empezaron a hacer sus propias trabajadoras y trabajadores. En un comunicado, explicaron que les avisaron que el programa dejará de lado “las acciones que impulsa y desarrolla desde hace 30 años en escuelas públicas de la Ciudad de Buenos Aires. De esta manera, 5.500 chicos y chicas de Escuelas Públicas de la Ciudad y más de 650 docentes dejarán de recibir talleres y capacitación para la formación de ciudadanos críticos”. Es un taller para leer de forma crítica a los medios de comunicación, ¿por qué el Gobierno macrista podría estar interesado en cerrarlo?

Además de promover esa lectura crítica, hacen talleres de cine, radio, fotoperiodismo, lectura y producción crítica de medios. Hacen festivales como Hacelo Corto en el Gaumont y Hacelo Foto en el Centro Cultural San Martín, además de un programa de radio en FM Boedo y en Radio Gráfica. Desde UTE se mostraron en contra del cierre de este programa.

No es lo único que se está desfinanciando, según las denuncias que vuelan este año. También hay Centros de Primera Infancia (CPIs) que cuestionan al Gobierno porteño por desfinanciamiento. Recordemos: los CPIs, que no forman parte del sistema educativo, son la forma en la que el Estado porteño busca desvincularse de su responsabilidad de dar educación desde los 45 días, como dice la Constitución porteña. Bueno, lo cierto es que dos CPIs de Barracas, “Rayuela” y “Pido Gancho”, denunciaron al gobierno de la Ciudad por "desfinanciar" a estos espacios, lo que perjudica a cientos de niños y a más de 40 trabajadores, según contó su directora, Mariela Lagar. “No podemos más sostener así los espacios”, advirtió, sobre la falta de actualización de las becas.  Así que no solo buscan desentenderse de construir más jardines, sino que tampoco se hacen demasiado cargo de los CPIs con los que reemplazan los jardines.

Eso no es todo: en la escuela de Enseñanza Artística Rogelio Yrurtia no solo están preocupados por la falta de financiamiento, sino por la falta de vacantes. Denunciaron que ahora quieren instalar otra escuela en la misma sede y de esta forma reducir el espacio disponible. Todo esto pese a que un centenar de estudiantes se quedaron afuera en la inscripción de este año por falta de vacantes. “La Educación Artística sufre nuevamente el ataque de Rodríguez Larreta y Soledad Acuña. Luego de todos los obstáculos sorteados por la comunidad para conseguir su edificio propio y digno, la ESEA Rogelio Yrurtia vive una vez más el avasallamiento del Gobierno de la Ciudad al querer instalar e imponer una escuela primaria en el mismo edificio”, denució UTE, quien indicó que esa directiva del Gobierno porteño no tiene en cuenta un fallo judicial del juez Francisco Ferrer.

Pero a no preocuparse, porque los que siguen tranquilos son los autos de los jueces. ¿A qué me refiero? A la decisión de meter alambrado alrededor de una escuela de la Villa 31 para separarla del estacionamiento de los jueces. Una magistrada, Patricia López Vergara, pidió información sobre cuántas escuelas tienen que soportar vallas similares y no quisieron responderle.  El Gobierno de la Ciudad rechazó el pedido por considerar que “contraviene el principio de congruencia” y que “no guarda relación con el objeto”. La magistrada ya pudo establecer que esos alambrados ponen en peligro la seguridad de las niñas y niños que asisten a esa escuela. Y los obliga a caminar bajo la lluvia. Pero, eso sí, los autos de los jueces, bien cuidados.